Golondrinas, hoy os he visto por la ventana del salón y me habéis dado mucha envidia.
Quién pudiera, como vosotras, vivir volando sin preocupaciones, solo tocar la tierra para beber, viajar a la vez que el verano y , sobre todo, no pasar nunca el tiempo suficiente en un mismo sitio como para ABURRIRSE.
No hay comentarios:
Publicar un comentario